llueve,
llueve
todavía.
inevitable
que suceda.
observo,
mi
sueño bajo tus pestañas,
la
bruma enemiga,
la
congregación de nubes.
ahora
silencio,
luego
niebla,
y
nadie,
nadie
mira el camino.
así
las cosas…
queda
quizá el recurso de estar solo,
de
vaciar el alma de ternura,
y una
única verdad revelada. l a f o t o g r a f í a.